La palabra boudoir proviene del francés que significa “tocador”. Por ello a través de estas sesiones, lo que se persigue es capturar esos detalles en los que las mujeres se arreglan, visten y maquillan. Son sesiones que se realizan en interiores, aprovechando en la medida de lo posible la luz natural proveniente del exterior. Y las fotos resultantes, son fotografías con poses naturales y donde prima siempre el buen gusto.